255 kms de viaje Madrid-Villargordo del Cabriel con un gato metido en el motor, la cabeza atorada entre el filtro del aire y el faro.
A ratos el coche aceleraba solo (lo aceleraba el gato con las patas al moverse).
Y no solo fueron las dos horas y media de tramo sino desde que cogí el coche en la mañana (ya noté que aceleraba solo) para hacer unas gestiones previas al viaje, o sea se pegó en esa postura unas 4 horas y media.
Me dio mucha pena por el animal, lo saqué y terminó asustado metido en otro coche del aparcamiento del area de servicio, supongo que no terminó bien pero no me iba a poner a buscar al dueño del coche porque había mucha gente.